Médicos Sin Fronteras/Médecins Sans Frontières (MSF) es una organización médico-humanitaria internacional creada por médicos y periodistas en Francia en 1971.
En más de 70 países de todo el mundo, MSF salva vidas proporcionando ayuda médica donde más se necesita: en conflictos armados, epidemias, catástrofes naturales y otras crisis. Las personas que trabajan para MSF son médicos, enfermeras, matronas, epidemiólogos, expertos en agua y saneamiento y muchos otros que combinan su experiencia profesional con un compromiso con las personas más vulnerables del mundo. Cada año, estos equipos médicos llevan a cabo cerca de 470 proyectos en los que atienden a millones de personas.
Como organización, MSF es neutral y actúa con independencia de cualquier agenda política, militar o religiosa. No toma partido en los conflictos armados, presta asistencia basándose únicamente en las necesidades y aboga por un mayor acceso independiente a las víctimas de conflictos y catástrofes, tal como exige el derecho internacional humanitario. Los equipos médicos realizan evaluaciones sobre el terreno para determinar las necesidades médicas de una población antes de abrir programas, con el objetivo de colmar las lagunas existentes (en lugar de replicar servicios que ya se ofrecen) o llegar a comunidades que no reciben asistencia. A lo largo de los años, la organización ha recibido varios premios que reconocen su labor, como el Premio Humanitario Conrad N. Hilton de 1998, el Premio Nobel de la Paz de 1999, el Premio J. William Fulbright al Entendimiento Internacional de 2012, el Premio Lasker-Bloomberg al Servicio Público de 2015 y el Premio Humanitario Pardes de Salud Mental de 2017.